G-20 pide a EE.UU. que abra su mercado de vuelos secretos con prisioneros de la CIA

Mateo Tontonetti (que pese a su nombre no es italiano sino vocero de la delegación rioplatense)
indicó que la postura del G-20 era sólida: "Hace décadas que establecimos, cae de cajón, que el espacio aéreo no puede ser tierra de nadie. En esa lógica, si los secuestrados, perdón, abducidos, son ciudadanos de los más diversos países, es una asimetría grave que las líneas aéreas usadas para trasladarlos a los "Centros de Demanda de La Verdad" sean sólo contratistas estadounidenses. Eso sin considerar las versiones que indican que la mayoría pertenecen a los amigos del Sr. Dick Cheney. Entendemos que Washington desee especializar su economía en servicios de punta, pero la globalización es incompatible con un mercado aéreo de secuestros, perdón, abducciones, poco transparente y oligopólico."